Faros de gran potencia que usan una lámpara de gas Xenón y que producen una característica luz azulada. La mayor ventaja es que el haz luminoso que desprenden tiene una intensidad 2,5 veces superior a la proporcionada por un faro convencional y tiene una distribución más uniforme y definida del espectro de luz. Además, la iluminación que proporcionan es muy similar a la solar, por lo que el trazado de la carretera y cualquier obstáculo se percibe mucho antes. Suele utilizarse para luz de cruce en sistemas de cuatro faros junto con luz halógena de carretera en conexión simultánea.